Uno de los problemas con los que se enfrenta el estudioso de teatro áureo es el de disponer de un método de segmentación de la pieza teatral áurea que se ajuste a sus peculiaridades. Entre los muchos que se han practicado y se practican, el que propuso Marc Vitse y que escoge como criterio prioritario –el de las variaciones métricas– ha despertado recientemente un gran interés. La introducción traza un estado de la cuestión y examina las distintas propuestas de segmentación que se han venido aplicando en los estudios de teatro áureo. Los ensayos parten de las propuestas metodológicas de Vitse y tratan de aplicarlas, aun discutiéndolas y explorando sus límites, a distintas piezas de Lope de Vega; nunca se olvida sin embargo en este cometido la importancia de la estructura espacial, que puede o no entrar en conflicto con la estructura métrica, y a la que se valora en mayor o menor medida según la pieza estudiada y el criterio del autor. Las obras analizadas cubren un abanico temporal muy amplio, que va desde los primeros tiempos de la producción del dramaturgo hasta el final de su larga vida; algunas de ellas forman parte de un canon ya consolidado (Peribáñez, El perro del hortelano), otras han sido relativamente menos frecuentadas por la crítica (Los melindres de Belisa, Las bizarrías de Belisa, El premio de la hermosura), o incluso se encuentran entre sus obras menos estudiadas (El Marqués de Mantua, Los palacios de Galiana y La mocedad de Roldán).